Toda buena comedia romántica, empieza con un personaje femenino y otro masculino, preferiblemente atractivos (tampoco vas a poner a dos amorfos de protagonistas), que no tienen nada en común o directamente se odian. El dueño de la tienda de guías de viaje y la estrella de cine, el quarteback y la típica pringada de instituto americano, el ejecutivo putero y una prostituta (estos tienen algo más en común, estaban condenados a encontrarse), Noah y su diario, etc.
Siguen un esquema más o menos parecido.Chico conoce a chica, por una apuesta, tal vez en una situación incómoda. De primeras los protagonistas se odian pero hay tensión sexual entre ellos que se percibe, ligeramente. Uno de los dos hace una cagada en ese primer encuentro pero se van conociendo y esa es la semilla que hará surgir el primer beso... ¡oh!.
30 segundos después llega el día más esperado. Los protagonistas tienen ese encuentro, mágico, donde el chico acompaña a la chica a su casa, besándose ante la puerta de la casa. Cuando el beso acaba, según se cierra la puerta, los dos cada uno a un lado de la susodicha, ponen sonrisa de imbéciles, suspiran y puede que hagan un par de movimientos de baile malignos. Alguna vez el chico se queda caliente como un mono, vuelve a llamar a la puerta para darle al tema. Entonces empieza una canción. Mientras suena la música el chico y la chica son felices, quedan, van al parque, a patinar sobre hielo, se ríen mientras se comen un helado o unas hamburguesas. "Uhuhu yo te limpio que te has manchado". Puede que conozcan a la familia del otro, o que le enseñe a motar en moto. Este es un gran recurso cinematográfico para que se vea que el amor va surgiendo.
Todo parece que va sobre ruedas, pero a los guionistas esto no les convence y deciden innovar dando un giro inesperado, porque claramente nadie puede predecir como será el final de la película. Entonces, chan chan chan, aparece un impedimento a la felicidad de nuestros héroes: Malentendido con la ex, un nuevo trabajo fuera de la ciudad, se descubre que hubo una apuesta o una adicción al alcohol. Obviamente esto lleva a una decepción terrible inducida por cabroncetes. Uno de los dos se va dolido de donde se ha discutido el amor verdadero... "¿Una apuesta Mary, cómo pudiste?".
Y empieza otra canción, esta vez triste para que se sienta el sufrimiento, es otro recurso radicalmente distinto al de la canción alegre, cualquier guionista te lo dirá. Al son de la música se ve como lo han dejado y lo infelices que son por ello, como miran el móvil esperando una llamada o como se acuerdan el uno del otro mientras pasean bajo la lluvia de manera solitaria y ven en un escaparate un sandwich, "A Kelly le gustaban los sandwiches". La canción acaba y el cagón tiene una conversación transcendental con un amigo o familiar (tal vez un progenitor con el que nunca se entendió) cercano que le ha humillado o puteado durante la película y le hace recordar el verdadero significado del amor tras mencionar un matrimonio feliz o al cónyuge muerto. Al protagonista se le ocurre que todo se arreglará con un gesto romántico como ir al aeropuerto, acudir una rueda de prensa, o a una fiesta muy elegante de esas que les gusta en USA soltando un buen discurso sobre chorradas, pero que finaliza y arregla todo con una coñita de pareja que salió durante la película.
-Nena, lo saben las ranas.
- Ajajaja, Ranas mi debilidad. Tómame James.
Todo esto ha sucedido en una semana, según la película. Es decir el amor más grande de la historia puede formarse un un finde. El que da el discurso viene a decir algo como: "Hace 5 días me volvías loco, no podía soportarte, me parecías retrasada, conseguiste que despidieran, pero ahora sé, tras este largo tiempo sin ti (24h), que te quiero". Amigo guionista, eres gilipollas. También podemos ver que en esa semana han pasado todas las estaciones desde primavera al invierno, incluso alguna repetida. En Gladiator hay un extintor, tampoco podemos tenerlo todo. Como no, hay personajes secundarios cómicos o bufones, amigos de ambos incluso algún compañero de piso, siempre estrafalarios. Nunca son inteligentes, pero hay que reconocer que los condenados tienen su gracia.
Otra curiosidad, los actores son SIEMPRE los mismos, de hecho les ves en películas distintas siendo la misma pareja. Elenco masculino: Hugh "Agente, no es una prostituta sólo es una vagabunda" Grant, Matthew "Voy a hacerme 5000 abdominales más" McConaughey, Ashton Kutcher, que me cae de lujo, o Gerard "Hice 300 y no se sabe porque me pasé a las películas de chicas, en vez de seguir matando gente en pantalla que es lo que mejor se me da" Butler. Luego están aquellos que directamente te sorprenden como Keanu Reeves pasando de ser Neo (héroe de la infancia y actual) a médico que se acuesta con Diane Keaton (60 años). Elenco femenino: Julia "tengo un buzón por boca" Roberts, Kate "soy un ángel" Hudson, Cameron "photoshop" Díaz, Drew "Fui drogadicta porque conocí a E.T" Barrymore. Incluso Jennifer Aniston... Jenny, Jenny ¿Qué te ha pasado?. Los no habituales es por que no ganan dinero y peor es robar.
Alguna tiene un final distinto, se suele ver venir pero es de agradecer. Yo propongo un par de finales alternativos: Hugh le pasa un herpes genital a Kate Hudson, no siguen juntos pero sin rencores, pelillos a la mar. Julia Roberts seduce a Ashton para luego divorciarse y quedarse con la fortuna de su marido, Asthon, acaba enajenado en un manicomio. Gerard muere atropellado por una ranchera, conducida por el viejo Mike dueño del típico bar US style, mientras daba su discurso de amor a Drew Barrymore en mitad de la autopista. Mathew deja embarazada a Diane Keaton para que sea madre soltera. ¡Sería mucho más impactante! Aunque ahora que lo pienso pasarían a ser películas de después de comer de Antena 3...
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