Smonker, catacroquer, secador y caca

sábado, 30 de octubre de 2010

Hermanos de sangre

Dentro de una familia hay muchos rangos: Abuelo, tío, primo, padre y por último hermano. Un hermano es aquel que nace o es adoptado dentro de la relación de tus padres. No tienes voto en el asunto, no lo eliges, ni él a ti, pero os va a tocar vivir juntos mucho tiempo, encima en la misma casa y puede que en el mismo cuarto. Es como entrar en Gran Hermano durante años pero sin posibilidad de ganar dinero y un puesto de tertuliano en un gran programa del corazón. Vas a convivir con alguien durante gran parte de tu vida y puede que ese alguien/hermano sea tu opuesto.

¿Qué problema hay? Que los hermanos son las personas que mejor te conocen del mundo. Saben donde te duele y lo exprimen sin piedad (igual que haces tú). Dominan tus debilidades, tus puntos fuertes, tus gustos, costumbres, todo, y  sacan ventaja de ello. Han visto tus momentos mas lamentables (esa canción que nadie sabe que te gusta... ellos lo saben), los de mayor éxito, te has tragado sus pedos y ellos los tuyos, no hay una relación mas fuerte. Tu mayor debilidad puede ser que se metan con tu aspecto, pues en la discusión con tus hermanos sobre quien pasea al perro es día saldrán palabras como gordo, pecho paloma, granudo, paella, cabezón, amorfo, nariz de pene, orejas de duende... Parecen poco elaborados pero las discusiones entre hermanos crean los mejores y mas efectivos motes ofensivos. De hecho los motes mejoran exponencialmente cuantos mas hermanos haya en la discusión.

 Hay una consecuencia inevitable de las discusiones entre varios hermanos, la guerra evolutiva. Empieza con un todos contra uno. (Eres un obeso cabrón, te has comido todas las putas galletas...). "Uno" pasa a atacar a alguno de todos, generalmente el que tenga el secreto mas reciente (Tu calla que el otro día te llevaste el coche de X y se lo dejaste sin gasolina). Entonces se cambian las posiciones y van todos contra el que inició el ataque (Cabronazo te llevaste mi coche... eres un gilipollas, etc). No existe un cabreo con el mismo nivel fuerza que el que se da entre hermanos. Si una novia te pone los cuernos, no sería comparable. Te enfadarías, dirías que es una zorra y que te ha arrancado el corazón y no vuelves a hablar con ella, pero con un hermano te entra un furor asesino... Unas ganas de pegarle un puñetazo en la cara y molerle a palos porque te ha pinchado donde sabe, de la forma que mas te jode, con las palabras que mas te cabrean y encima con gestitos. Se ha llevado tu abrigo el día que lo necesitabas, se ha puesto del lado de tus padres, no por compartir opinión si no por tocarte la moral, te ha cambiado lo que estabas viendo en la tele, se ha comido la puta despensa entera, etc. Es verdad que el cabreo dura poco, al día se te pasa y todo tan normal porque por eso es tu hermano.

Donde más se choca con los hermanos es en cualquier tipo de competición. He visto raquetas volar. Algunas me las tiraron a mi, otras las tiré yo... He visto mandos de play reventar, todos los reventé yo... He oído muchos ahora te vas a cagar y que quien lo dijo sufrió una humillación peor... He visto muchas caras de no me ha dolido y la siguiente explosión de llanto y rabia contra mi... Las peores mierdas de mi vida me las han dicho mis hermanos, pero el cabreó nunca duró mas de 1 día.

Pero por eso, porque es tu hermano, es el que mejor puede cubrirte. "No hay mayor lealtad que la de un hermano" me dijo Xenu, un amigo sabio. Y es verdad. Algo que nunca debe olvidarse es que entre hermanos hay jerarquía. Si eres el hermano mayor DEBES promover la lealtad y unión de la manada. Cubrir a tus hermanos, mediar por ellos, dar consejos, intentar dar un mínimo ejemplo, no darles la chapa con broncas que no eres su padre... Hay que entenderlo, ellos han nacido en este orden: Plata, Bronce y diplomas olímpicos, mientras que tu ya has nacido con el oro. Sin competición ni nada y ya han quedado por detrás tuyo...  Ayúdales y la lealtad será eterna. Encima les has abierto el camino. Donde ellos llegan a las 2, tú llegabas a las 12. Ellos se pillan su primera tajada gorda con 15, tú lo hiciste con 16. Ellos tenían móvil a los 13, tú tenías el fijo de tu casa. ¿Algo tendrán que hacer ellos por ti ahora no?

Con hermanos vives en un permanente y extraño estado de comunismo. Lo tuyo es de todos pero lo de los demás no puedes tocarlo. La comida en mi casa es un bien escaso, somos 5 chicos mas mis padres. Si quieres comer las galletas que te gustan tienes que usar alguna triquiñuelas, como guardar esas galletas el la zona de las verduras de tu nevera (lugar en el que NADIE mira). No solo la comida, la play o el ordenador. O estas espabilado y tomas posición antes que ellos, o les intentas encasquetar una tarea que te encomendaron a ti. "Mama ha dicho que saques la basura..." En cuanto se levante, si ha colado que no es normal, coge su sitio, el mando y a disfrutar. La ropa. En las hermanas se mantiene el comunismo, pero entre hermanos es lo único que no suele compartirse. Otra cosa que está de lujo es compartir aficiones con tus hermanos. Permite un uso simultaneo de algo que ambos quieren.

A un hermano hay que verlo como un amigo que encima tiene un vínculo de sangre contigo. Es la combinación perfecta. Siempre estará ahí. Da igual lo que le digas, lo que te diga porque eres el mayor y siempre tendrás razón. ¡Que hubieran nacido antes, no te jode!

viernes, 22 de octubre de 2010

Don't jump!

¿Estás de bajón pequeño Timmy? ¿La dormidina ha  dejado de hacerte efecto y te cuesta dormir? ¿No puedes emborracharte sin tener ese momento en el que tu cerebro se rebela, saca una idea que te jode la noche y te tienta para que envíes mensajes turbios a diestro y siniestro?  Tranquilo, existe una solución.

De bajón puedes estar por muchos motivos, incluso por ninguno en particular simplemente te da. Un día te levantas y tienes menos ganas aun de hacer aquello que hagas habitualmente (clase, curro o estudiar). No te extraña, ni que hacer esas mierdas fuera divertido. 

 Va pasando la semana y sólo hay un pensamiento en tu cabeza, que llegue el día de la farra (jueves y/o viernes). ¿Pero qué pasa cuando llega el tan ansiado día? Tú, en principio, estás con ganas mortales de salir, pero según se acerca el momento de abandonar tu casa el ánimo va bajando. Te llama un amigo para contarte el plan, según acaba empiezas a sacar todos los defectos posibles a ese plan y todas la variantes que pudiera tener. Copas en casa de... Eso está a tomar por culo. Botellón en... ¿Con el frió qué hace?. Vamos al bar... Pero si eso cuesta una pasta, puto Rockefeller. Barra libre a una manzana de tu casa y gratis... ¿Quienes van? Estos 3, ¿Sólo?. Así con todo, da igual lo que te digan alguna pega tendrá, si no la encuentras, pasas a las excusas personales como: No me encuentro muy bien, creo que estoy enfermo... Estoy cansado... Del facebook ¿No cabrón?. Llevo una semana sin parar... Ya salí ayer. ¿No ha funcionado? ¿Tus amigos te han convencido y presionado? Pues muy fácil... Ve a las copas, botellón, y bebe como si fuera el último día de tu vida, eso te evitará sms incómodos ya que serán incomprensibles o pensamientos problemáticos. Beber lo mejora todo, seguro y si aun así te da el bajón es que no has bebido suficiente.

Cuanto mas ganas le tengas a una noche, peor será. Es Murphy. Nadie te llevará al botellón. El alcohol te lo robará algún soplapollas al que esperas que pillen en un control. En la discoteca te tirarán los puertas (esto las mujeres no pueden entenderlo, nunca les pasa). Si entras será porque tienes el privilegio de pagar 16 euros. Una vez dentro será un campo de nabos, etc. Pero sin duda lo mas peligroso de una "noche bomba" será volver a tu casa. De hecho aumentan las posibilidades de hacer el Moises en un 50%. Tu vuelta a la "tierra prometida"  durará cuarenta años, será como hacerlo por el desierto debido a la deshidratación del alcohol y si Dios se ponerliteral con la Biblia, te quedarás a la puerta después de tan duro peregrinaje (falta de llaves, alguien se dejó la llave puesta en el otro lado de tu puerta...)

Si estás de bajón no cargues el problema de la semana en la noche de farra, pobre, ella no te ha hecho nada. Que lo paguen tu familia o amigos. Piensa que la noche va a ser una mierda, como tu semana y seguro que será la polla. Es verdad que con un nivel de alcohol aceptable y suficiente hasta la noche de fin de año puede ser inolvidable. ¿Por qué no un día de septiembre u octubre meses coñazo por excelencia?

jueves, 14 de octubre de 2010

Hard Stuff

   Hacer cosas puede ser divertido, normal o coñazo, pero la linea que separa la diversión del aburrimiento suele ser si te están obligando o no a hacer dicha cosa. Así gráficamente: Recoger el cuarto. ¿Qué te están diciendo todo el día en tu casa: Recoge tu cuarto, recoge tu cuarto, recoge tu cuarto? Tu como buen hijo, pruebas la táctica del que escucha llover, pero tus padres te hacen la del diluvio universal. Al final, la única opción viable que ves para solventar el problema es coger un bidón de gasolina y quemar todas tus cosas antes que recoger. Pero un día que nadie te comenta nada nada y decides que vas a hacer Feng Shui en tu cuarto. Te haces la cama con calma y cuidado, pasas lpantalones de la silla al armario, los zapatos del suelo a estar ordenados en fila, los calzoncillos a cualquier sitio de la casa que no sea tu propio cuarto, etc. Como has querido hacerlo tú, no es TAN pesado.

   Sin embargo nunca se vio a nadie a quien le obligaran a hacer algo divertido, como salir. Hijo, toma 100 euros, emborráchate esta noche como Dios manda, si mañana no hueles a whisky y tabaco prepárate para que no te deje nada en el testamento. Progenitor, que es domingo, el día del señor... Sin excusas hijo.  Y aunque eso pasara a alguien (futuro drogadicto), esa noche sería un coñazo porque le estarían obligando.

   También hay cosas que haces por "obligación" y que te encantan, de hecho intentas hacerlas perfectas porque te interesa y es divertido. Llegas a un trabajo, hay muchos proyectos atractivos, tienes suerte y te dejan elegir. Decides que lo que mas te interesa es el proyecto para acabar con superpoblación de aves en Madrid. Es un tema que te encanta (no se sabe porque). Empiezas suave, envías un mail al ayuntamiento para informarte y montas reuniones casuales con la concejala (mas ayudantes) para ir solucionando todo el tema sin que mueran todos esos maravillosos pájaros que bombardean en vez de cagar. Preguntas a los exterminadores para que te den su opinión y te dicen: Matalas a todas. Lo tienes en cuenta, pero por si acaso preguntas a los ecologistas que piden que tengas paciencia con los pobres animalitos voladores. Viendo como está el asunto, acudes al colegio de veterinarios que te ayudan de manera mas que eficiente. Mientras sopesas todas tus opciones, vas avanzando en tu hoja de excel con un plan que parece viable (lento pero seguro), y todo está hecho, sólo te falta imprimir y entregar a la mañana siguiente el proyecto a tu jefe, hay un apagón en la empresa. Se rompe tu ordenador y se va todo a tomar por culo. No te cagas en todo, te quieres cortar las venas... Todo tu duro trabajo, a la basura, así de risas. No es culpa tuya, has hecho todo lo que estaba en tu mano pero al jefe eso le va a importar... Da igual que no pagara la factura de la luz durante meses. Te despide y fuera, por no imprimir. Eso no quita que fuera divertido, pero como jode que el esfuerzo no sirva.

   Hay cosas que se hacen por otros, un poco basadas en el lema: Hoy por ti, mañana por mi. Suele darse entre amigos o hermanos. A un conocido en cambio le haces un fuck you de esos que se convierten en una leyenda urbana, que le contarán a tus nietos. Situación tipo entre dos buenos amigos, Juanito y Pepito:
-Vamos a las copas de Fulana que... dijo Pepito.
-¡Están a tomar y encima en ese grupo son TODAS retrasadas!- contestó sorprendido Juanito ante la proposición indecente de Pepito.
-Tio nos invitan al botellón y tampoco son retrasadas todas... Menga-
-¿Quieres pillar no?- dijo cortante Juanito
-Básicamente- asintió Pepito
-Venga vamos.

   La próxima vez que Juanito quiera algo, podrá pedirlo sin miedo. Que Pepito le acerque al aeropuerto a las 4 de la mañana, que le acompañe al peor tugurio del mundo, un par de euros, que le recoja si se ha quedado sin gasolina en mitad de la a-6, que le haga un pinganillazo, que le sujete la cabeza mientras vomita semi-inconsciente, etc. Claro está que tampoco se puede abusar, los amigos ayudan (y muchísimo) pero no son gilipollas. Los hermanos es harina de otro costal, tienes y tienen permiso para pedir lo que sea.

   Y por último están las cosas directamente coñazo y que siempre serán así. Esas en las que mientras estas en tu casa tranquilamente haciendo algo no coñazo, se escucha la voz de tu madre:
-Razumijin ven un momento.
-¿Para qué?(x2) -contestas hábilmente.
-Te he dicho que vengas, por favor(x4).
-¿Pero para qué? -ya de mala leche. Ella entonces te dice una tarea coñazo al azar (del hogar o recado) y según empiezas a hacerla te suelta:
-Para hacerlo con mala cara mejor no lo hagas.
-Si le parece a mi ama, vengo sonriendo que meter todas la cajas de ropa de verano en los altillos es lo que mas me apetece. ¡No te jode!

viernes, 8 de octubre de 2010

Viajar o Travel.

Si alguna vez viste unos dibujos animados llamados La vuelta al mundo de Willy Fog, con un león de dudosa reputación como protagonista, que viajaba con su globo (¿Quién cojones tiene un globo?) y su mayordomo, Rigodón, automáticamente te vendrá a la cabeza: ¡Quiero viajar!. El viejo Willy decidió dar la vuelta al mundo en menos de 80 días. Tú como alma inocente veía esta serie de animación no digital (que coñazo soy) y creías: VIAJAR ES LA POLLA. Comparemos como viajaba el león y como lo hace cualquier mortal no empastado.

Willy tenía un globo propio. En su momento hizo una inversión arriesgada, hay que afrontarlo, es jodido comprar un globo y amortizarlo, pero William era un visionario; dejo de pagar un pulmón por cada vuelo y nunca puso un pie en ningún aeropuerto o embudo infernal. Lo clavó. Hay que repetirlo, los aeropuertos dan asco, si el diablo tuviera un trabajo seguro que sería como coordinador ejecutivo de aeropuertos en un ministerio, consejero delegado de aena o segurata del control de seguridad.

 Mas de 3 horas en aeropuerto y pierdes la cabeza, la dignidad y una pasta. ¿Comida y bebida? 100 euros. ¿El baño? Huele a meado antiguo y no sabes quién habrá puesto su internacional culo en el retrete... ¿Hay asientos para sentarte y descansar? Sí, con un diseño ergonómico para romperte la espalda ¿Es seguro? Claro, nadie te puede robar la maleta o meterte cualquier cosa, por eso hay unas máquinas para embalar que funcionan...  ¿Por lo menos hay algo que hacer? Mirar escaparates con cosas que no podrás comprar o a una puta pantalla en la que tu vuelo sale como delayed, ¡ah! y vigilar tu maleta. Son un lugar tan retorcido que puedes encontrarte en la puerta de embarque, de un aeropuerto de una ciudad alemana, con los padres de tu ex (simpáticos a rabiar pero al fin y al cabo...).

Fog no tardaba media hora en llegar, dos hasta que se subía al globo y otras dos hasta su hotel, metro incluido. Él iba de puerta a puerta. Pillaba el globo cuando le brotaba, no tenía horarios ni compromisos. "Oye, me apuesto que me marco un viaje (no por su país o por Europa por el mundo) de al menos 80 días" Muy buena Willy. Ahora como se lo propondrías a alguien con cierta autoridad en la realidad: "Papa, que me voy a dar la vuelta al mundo en menos de...", según lo estás diciendo ya te ha caído un viaje que te ha volado la cabeza. "Jefe, que me voy 80 días a..." "Despedido Pérez y ahora haga el viaje que más le guste". De hecho no cargaba ni con maletas, para eso estaba Rigodón. En cambio todo el mundo carga con su maleta de ruedas, que eso suena como una puta manada de elefantes persiguiéndote.

Los aviones... ¿Cómo vuela una lata gigante, llena de personas combustible y comida? Mierdas de ingenieros. Pero que espaciosos, bien distribuidos, buscando siempre la comodidad del pasajero con ese servicio de vuelo que constantemente te ofrece cosas a comprar y si ven que estás dormido te lo gritan con paciencia al oído para que no te pierdas esa maravillosa oferta del pitillo electrónico. Esos baños limpios e higiénicos con agua azul pitufo. No quiero dejarme esos momento inolvidables como un vuelo de 8 horas con un bebé expresando su disconformidad con todo, mediante unos lloros que dan ganas de meterle un par de dormidinas amorosas.. o esas señoras comentando sobre lo divino, lo humano y sus varices.

Y el idioma... Mr Fog, pagaba al primero que veía por la calle, le ofrecía una libra y ya tenía a un traductor titulado que había estudiado el idioma de lujo, encima le hacía de guía y llegado el caso ofrecía su vida en una situación peligrosa para que Fog llegará a su casa. En el extranjero, preguntas a alguien por la calle y da gracias si sabe hablar su puto idioma sin fallos, aunque en España somos premios Nobel en esa materia. Por lo menos en el extranjero no te gritan y te hacen gestos como si fueras retrasado, sólo te miran con desprecio.

Viajar es acojonante, excepto porque hay que hacer un viaje.

miércoles, 6 de octubre de 2010

Trash talking.

Nada bueno sale de una conversación nocturna entre un chico y una chica. Vale, eso que está escrito es mentira, pueden salir muchas cosas buenas, o al menos una. El problema es que si ya hablar con alguien que no tiene los mismos órganos sexuales que tú durante el día es complicado, de noche... es como estornudar con los ojos abiertos o chuparse el codo (no se porque alguien lo intentó por primera vez).

¿Y por qué de noche es más complicado? Porque de noche hay algo que durante el día no hay tanto (salvo que se padezca cierta adicción que deja tu hígado listo para ser enlatado en envases con la tapa negra): alcohol; ese ingrediente secreto que da sabor a las colonias mas exquisitas y que da ciertos poderes a quien lo consume para que haga cosas... como: Volverse más agresivo, volverse gilipollas, deprimir, animar hasta el infinito y más allá, servir de afrodisíaco mental (¿ehm?), darte el valor para enfrentarte a las serpientes nocturnas, incluso cambiar tu visión del mundo por una mucho más divertida y peligrosa, o el ya mencionado hablar con alguien con unos bajos articulados de otra manera.

Pero el mayor poder es el de la desinhibición. No de ese tipo en el que alguien se quita la camisa o se baja los pantalones, más del estilo: Voy a atreverme a hacer aquello que nunca o muy difícilmente haría sobrio. Tomar esa curva imposible en la que sin alcohol temerías por tu vida, robar un parquimetro, vacilar a un policía, hacer ese examen en el que te pones tan nervioso, mantener una lucha a vida o muerte contra el océano para que tu cama siga a flote, o decirle a alguien que no te da igual, cosas buenas o terribles por mensajito e incluso a la cara. Para ganar este poder y empezar a hablar con quien no te atreves, sacrificas mínimo el 40% de cada sentido pero justo para hablar, poder explicarte, que te entiendan, que te expliquen y que tu lo entiendas se necesita ese 40% eliminado, puede que mas. ¡Es un jodido círculo vicioso!

Siguiendo con lo de hablar; también hay lucha contra la imagen mental de cada uno respecto a los "otros". Es que los tíos no entendéis... Es que vosotras decís... Si empiezas con esa mierda prepárate, ve al baño, haz lo que tengas que hacer, porque va a durar, mucho, tanto como algo que sea muy largo y se te ocurra. Vas a hablarle a una tia en una discoteca y ya se pone a la defensiva, te ve, piensa que le vas a entrar, empieza a poner caras, te acercas y dices dulcemente: "¡Levanta de mi abrigo!", o cuando una diosa te habla en una discoteca y es MUY simpática contigo, siento decirlo, sólo quiere una copa. Es verdad que una mujer siempre sale perdiendo en la conversación nocturna. Si es simpática y no se lía contigo: es una calienta. Que pasa de ti y es borde: engreida de los cojones o lesbiana (en serio, que una tía no se líe contigo significa que no le gustas, no que le vaya a hacer la tijera), etc. Pero igual que no todas quieren sajar copas, no todos intentan venderte una moto para pillar. Puede que le gustes, en cualquiera de los dos casos, aunque no es lo más normal... ¡UO!

Por último está lo peor, que es dar a conocer tu mensaje, a quien sea, tajado. ES IMPOSIBLE. "Papa que no voy borracho..." Eso es lo que aparece en tu cabeza, pero en realidad estas pegado a la pared diciendo que quieres vohmetitar... Eso a tu padre, que lo máximo que hará es darte una charla para que te sientas culpable (te hacen sentir mierda). O con un policía que te dice "Sople aquí", tu piensas que lo vas a hacer de lujo, que estás siendo respetuoso y educado mientras a gritas: "¡PIM PAM TOMA LACASITOS!". Hasta ahí tampoco te pones nervioso. Pero con alguien que te provoca "ideas malignas"... empiezas a hablar, tranquilamente sueltas una que en tu cabeza sonaba de lujo, pero según la acabas de decir te das cuenta de como ha sonado (DE PUTO CULO) y aunque no quisieras decir eso si no algo parecido que mola el doble, ya está dicho. Al segundo piensas en otra cosa para contrarestar pero te ves diciendo en ese mismo momento otra mucho peor. Todo se parece a lo que quieres decir y alguna aciertas, pero seguro que no querías decir pim pam toma lacasitos...
 Solución: habla borracho sólo cuando nadie vaya a acordarse, ni tus padres, ni el policía, ni tus amigos, ni ella o por lo menos bebe tanto como para que te sea imposible acordarte de nada y si aun así te acuerdas... mereció la pena hacerlo. 

lunes, 4 de octubre de 2010

Hagan sus apuestas.

Llegas al casino, has dejado tu sucio y viejo coche (cagadas de paloma incluidas) en el aparcacoches. "Con cuidado, es un clásico" le dices a Mario, el aparcacohes. Vas del rollo zumbado, solamente con el dinero que pretendes pulirte esa noche saliendo. La ruleta aparece ante tus ojos, no esa en la que apuesta mínima es de 2.5 euros, la de los ludópatas. Decides que te vas a jugar la noche en una tirada, pones las fichas y la esperanza de no perder todo el dinero que tienes ese día al rojo. Según empieza a girar la ruleta sabes que la has liado...

Tomar un riesgo tiene su dosis de adrenalina. Ese subidón que te da tras hacer algo que no sabes como te va a salir cuando te la juegas en algo importante, es tan divertido como jodido, las dos cosas al mismo tiempo. Son necesarios, de hecho mucho más que las verduras. Nadie puede saber como irá tu liada particular, tú sólo sabes que estás tenso y que quieres que se acabe. ¿Cómo es un momento "¿Qué he hecho?"? Un par de ejemplos.

Examen de una materia complicada que no te ha dado tiempo y a la que debes presentarte. Tú has decidido hacer una quiniela, pero no una cualquiera, de 400 páginas te sabes las 20 que crees más importantes. Llegas al aula relativamente tranquilo un par de guiños por aquí, el gesto de la pistola con la mano, ¿Qué es lo peor qué puede pasar? ¿Qué suspendas? Ese riesgo parece asumido ¿no?. Hablas con la gente, te ríes, matas el tiempo hasta que te sientas y el profesor dice que va a repartir el examen boca abajo. Desde el momento que empieza a repartir hasta que das la vuelta al examen y lees las preguntas, eso es un momento "¿Qué he hecho?".  Es aplicable al trabajo, te mandan hacer un trámite o tarea importante, tú para quedar mejor y demostrar tu iniciativa lo haces según el criterio que te brote en ese momento. Desde el momento que lo acabas de hacer hasta que te llame the boss estás en un momento "¿Qué he hecho?".

Cuando intentas saltarte algo, evitar pagar o liarla. Ves a la policía y vas en tu coche, da igual que no hayas hecho nada aunque mejor que no vayas pedo, ya que estarás pensando a ver si te paran, con el consecuente gesto de estar buscando una emisora de radio o hacer que colocas el espejo, parecer normal es tu objetivo (porros o botellas abiertas por el coche no favorecen la normalidad). Puede que estés en un país como Alemania, donde son tan confiados que en el metro no hay ningún tipo de medida para forzarte a pagar, te subes y a dar vueltas por la ciudad de turno. Eso sí, ves a alguien con gorrito o pinta de revisor y se te para el corazón.

Pero el momento "¿Qué he hecho?" por excelencia es siempre con alguien que te gusta. Has tonteado, jiji jaja, todo muy divertido, con su emoción pero sin ninguna presión. Pero ese pasito hacia delante, ese gesto o frase comprometedora donde te delatas y que tras hacerlo te cagas vivo, eso es un subidón. El momento antes de que te "contesten" a tu acto de confesión roza el ataque al corazón, intentas disimular la cara de soplapollas que estas poniendo o por lo menos minimizarla, mientras el tiempo se vuelve eterno por lo menos. Y ella te contesta... Who knows? ¡Quien no arriesga no gana! Y aunque salga mal... como mola apostar a algo.