Smonker, catacroquer, secador y caca

viernes, 16 de julio de 2010

¡Juzga el libro por sus tapas!

Siempre que conocemos a una persona nos llevamos una primera impresión, en muchos casos definitiva.

La impresión empieza a una distancia prudencial: "Te voy a presentar a Mengano, está allí". Claro, empiezas a decidir/juzgar como es esa persona nada mas escuchar: "Te voy a pres..." de manera totalmente subjetiva. De hecho es tan subjetivo que puedes odiar a esa persona en el momento en que da 1 paso hacia donde estás con el presentador.

Esta primera impresión suele empezar sin ser muy profunda, basándote en su cara, a lo lejos: Tienes múltiples opciones que se mueven en este rango, desde: "Que fea es esta tia..." a "¡GISELE TE QUIERO!". Es verdad que hay caras que hablan por sí solas, según la ves sabes que esa persona le falta un hervor, pequeño, pero le falta, caras que nos dicen: Soy gilipollas. Lo nos cuesta un poco más aceptar que alguien tiene cara de inteligente, y con razón, es tan raro que alguien tenga esta cara que la mayoría de las veces que pensamos: "Oh, un erudito", suelen ser errores de cálculo. Esta primera fase de la primera impresión, es bastante cambiante (se va moviendo la escala dentro del rango según se va acercando el impresionista, en mi caso muchas veces hay unos saltos en la escala de Gisele a Orco que me quedo en shock unos segundos, hasta cuesta reponerse) y corta, milésimas de segundo pero ya que has empezado a analizar, das el siguiente paso: Observar y clasificar por su pelo, físico y ropa (incluyo todo, complementos, tatuajes, parches, etc).

Aquí te tomas 2 segunditos, un par de miraditas, mientras comenta el tiempo que hace que no se ven el presentador y el impresionista. Rapidamente piensas que el peinado es de gilipollas o que mola de cojones, en este tema no existe punto medio. Si te gusta harás un comentario tipo: "Ostia como te queda de bien el pelo afro", si no, pensarás: "Puto pelopolla...". Bajas un poco más la cabeza y ves el cuerpo, y salvo playa nudista, sus vestimentas. Hay gente con prejuicios, prejuicios que tienen que ver con el físico: gordo=simpático, tia buena=flipada+imbecil+estúpida, delgado= come algo... que vas a morir en breves de una enfermedad desconocida que llevará tu nombre, ve al médico, gente bajita=pobrecillo... le voy a meter en el bolsillo a ver si alguien le va a pisar... pero eso es una cagada, el físico salvo extremos, no dice nada potente.
Como mola la ropa/complementos. Ayuda a clasificar a la velocidad de la luz. Pero, ya que llevas un paso previo con el guapo feo, ya te fijas, de manera clasista a que grupo pertenece el impresionista. Es piba, miras 3 vertientes: Viste bien, viste como una zorra salvaje o viste raro, una vez decides pasas a: es sor vicio (una pija que va de monja pero NO), macarra, es furcia, es un cañon, pija, pihippie (pija que va de hippie), normal, surfera, rapera, perra ladradora poco mordedora, loca de manicomio. Hay demasiados tipos. Con un pibe, te saltas un poco el viste bien o mal, salvo hortera de la ostia. Es un poco más directo, pijazo, pijo Y andaluz (viene a ser... lo qeu coca-cola con bayliss), macarra, pasota, pijo que va de pasota(...), normal, fucker, así hasta el infinito. Hay elementos que por el hecho de llevarlos ya eres de ese grupo: Pelo engominado hacia atrás, pendiente de coco, pendientes de oro con forma de aro gigante, llevar una gorra como un memo, entre otros.

Cuando has completado la segunda fase ya tienes tres elementos del puzzle: CARA, FÍSICO y GRUPO al que pertenece. Ejemplo: Fea, gorda y del grupo freak= Petarda de los cojones. Guapo, delgado y pijazo= fucker de green. No dejan de ser estereotipos, puedes fallar de manera clamorosa, incluso con los pijos Y andaluces. Falta la clave. La clave que define toda primera impresión es el comportamiento de los primeros 5 minutos del impresionista, contigo y con el resto del mundo.

5 minutos cuando conoces a alguien pueden valer una idea de esa persona para el resto de tu vida. Como se presente alguien, como se comporta con el presentador y sus amigos, es vital. Intuición y subjetivo pero es lo que hacemos. Alguien que sonríe cae muy bien, si sonríe y no tiene dientes cae aún mejor, pero si se pasa de sonreír empieza a parecer gilipollas y caer de culo(mi caso). Aquella persona que te saluda que parece que acaba de perdonarte la vida, es GILIPOLLAS en tu cabeza, para el resto de la vida que te ha perdonado. Un gesto o un comentario, te encumbra o te destruye, situaciones míticas como: Poner pose de cowboy y caminar hacia alguien como si acabaras de bajarte del caballo, Jaime se encuentra con Marta: "Enhorabuena, no sabía que estabas embarazada.", "No, sólo gorda". Hacer un fuck you a un colega y que parezca que se lo haces a quien te van a presentar, que se te repita el gazpacho de la cena cuando estás dando dos besos de presentación, "Que fea es esa piba". "Soy la novia de tu amigo...", Que alguien te pase en una discoteca o te de copas gratis: "Que majo tu colega". Aquí ya tienes la foto, y juzgas en 5 minutos y 10 segundos a una persona. Pero si alguien se salva del juicio, es más guapa y simpática, si no lo hace odias a esa persona. Te acuerdas de la primera vez que conociste a un amigo comparas como le ves ahora y piensas: El cabrón se ha operado o qué.

No hay que perder la esperanza, cagones, porque esas impresiones se pueden cambiar con MUCHO esfuerzo. Quien no ha pensado: "Esta tia, que nunca me había fijado y pensaba que era corta, es inteligente, simpática y una persona de la ostia... Coño, de hecho está mucho más buena ahora que antes ¿no?" o al revés. La realidad es que, excepto en la pubertad u operación quirúrgica, a la gente no le cambia el físico, simplemente, les juzgamos de culo al principio. CONCLUSIÓN: LA FORMA DE SER ALTERA PROFUNDAMENTE LA PERCEPCIÓN DEL FÍSICO DE ESA PERSONA. No la cagues y conoce a las personas durante mínimo, 10 minutos, te sorprenderás.

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